El delirante orden de las cosas
Exposición colectiva durante PESE A TODO IMAGINAR, 2da edición de Palmera Ardiendo en Cuernavaca
Verano de 2021.
Los fauxtogramas se presentaron en Cuernavaca durante El delirante orden de las cosas, que fue la segunda edición de Palmera Ardiendo.
Para anunciar la exposición se prepararon varios videos y durante las visitas se presentaron los fauxtogramas acompañados por la banda sonora de La casa de té.
Las fotografías del evento son cortesía de Palmera Ardiendo.
_____________________________
Texto curatorial de El delirante orden de las cosas:
Anticipar la realidad creando ficciones, especulaciones o sociedades imaginarias ha sido una de las grandes inquietudes a lo largo de la historia de la humanidad. Imaginar otros futuros, a pesar de ser irrealizables, es esencial para todas las sociedades que busquen articular todas las necesidades del presente y con ello proponer espacios de reflexión mucho más radicales e imaginativos que los que podrían sugerir reformas políticas o sociales.
Durante las últimas décadas, la posibilidad de vislumbrar alternativas aproblemáticas actuales parece haber desaparecido. El contexto actual marcó una pauta sin precedente de crisis en el mundo, y dejó suspendidas luchas ya comenzadas en busca de la libertad, la igualdad, la equidad de género, la preservación de la naturaleza y la descolonización. El porvenir nunca fue tan
desolador.
Este panorama, aparentemente sin alternativas, nos ha conducido a eludir el pensamiento utópico y no sólo hemos dejado de crear opciones, sino que, peligrosamente, hemos dejado de imaginarlas ¿dónde quedó el futuro? La cancelación del futuro o la idea de que el futuro está suspendido lleva ya varias décadas anunciándose e incluso se ha pensado en el fin de la historia. Esta visión tan desesperanzadora reconoce, por un lado, que el futuro (o al menos uno mejor) está más allá de nuestro alcance localizado, y es siempre pospuesta e irrealizable. Sin embargo, también incita a la búsqueda de estrategias utópicas para intentar salir del laberinto de interminables bifurcaciones en el que nos encontramos atrapados.
Ante la preocupante parálisis del imaginario político y social, PESE A TODO IMAGINAR –segunda edición de Palmera Ardiendo– busca reunir a la comunidad cultural y a diversos públicos para poner en marcha la imaginación colectiva y proyectar escenarios diferentes al presente, a través del arte contemporáneo.
Durante el próximo año, desarrollaremos una línea de investigación que aglutine utopías, ficciones, análisis y otras estrategias para proponer lo irrealizable y comenzar a vislumbrar, aún a la distancia, el futuro que imaginamos.
Es cada vez más evidente que las narrativas que hemos construido y que acechan el porvenir necesitan encontrar nuevos horizontes. PESE A TODO, IMAGINAR busca explorar respuestas desde perspectivas unas veces críticas, otras más idealistas, pesimistas o nostálgicas, al tiempo de reconocer las contradicciones e imposibilidades existentes en el porvenir. La edición funciona como una especie de brújula que nos guía para identificar futuros preferibles para explorar las potencialidades existentes en la arquitectura, la ciencia ficción, la tecnología y la naturaleza.
Para Palmera Ardiendo, recuperar la noción del futuro se antoja no sólo fascinante, sino urgente e imprescindible. Pues sabemos que imaginar posibilidades y generar espacios para el pensamiento son temas prioritarios para cualquier proyecto que proponga articular alternativas a pesar de saberlas utópicas. Más aún, somos conscientes de que estos procesos deben partir de nuestra relaciones con lo local y lo inmediato; con los espacios que ocupamos y las maneras en que decidimos ocuparlos; con tomar postura y exigirle más a nuestro contexto. Sabemos también que pensar en el futuro es en gran parte dejar de proyectarlo en el porvenir y echar
andar en el presente todas las estrategias con las que contamos para incidir en nuestras realidades.
Esperamos que una iniciativa como esta permita poner en perspectiva la importancia de proyectar lo que podría ser ya sea en el espíritu de la crítica o como un dispositivo que incita al cambio. Tal vez el arte sea un lugar donde es posible imaginar otros futuros, hasta llegar a hacerlos realidad.